El jefe provincial de Policía de Huesca, a juicio por el «chivatazo» a ETA

El jefe provincial de la Policía Nacional en Huesca, Enrique Pamiés, que antes de asumir este puesto hace un año fue máximo responsable de la Policía Nacional en el País Vasco, se sentará en el banquillo como acusado por el caso del «chivatazo» a ETA ocurrido el 4 de mayo de 2006 en el bar «Faisán» de Irún. Se le imputa la presunta comisión de delitos de revelación de secretos y colaboración con ETA, al haber avisado a un miembro de la banda y dueño del bar, Joseba Elosua, de que iba a ser detenido, lo que le permitió quedar sobreaviso y huir. Elosua se lo contó a su yerno en el interior de su coche, que estaba bajo vigilancia policial. Eso, unido al cruce de llamadas entre los procesados y el propio testimonio de Elosua, son algunos de los indicios que acreditan la participación de Pamiés en estos hechos, sucedidos cuando el Gobierno de Zapatero negociaba con ETA durante la tregua de la banda terrorista, y cuando Pamiés tenía como máximos «jefes» al secretario de Estado Antonio Camacho y al entonces ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba.

Hace más de un año, poco antes de que Pamiés fuera destinado como jefe provincial de la Policía Nacional en Huesca, la Audiencia Nacional revocó su procesamiento y el de uno de sus subordinados en el País Vasco, el inspector José María Ballesteros. En aquel momento, la Audiencia entendió que no estaban suficientemente claros los indicios para sentarles en el banquillo, pero ahora los tres magistrados de la Sección Segunda aseguran que las objeciones que habia entonces están ahora «sobradamente superadas, aclaradas y resueltas». Y, por tnato, sí hay indicios suficientes de que Pamiés y Ballesteros participaron en aquel «chivatazo» ocurrido cuando ETA se encontraba en tregua y el Gobierno de Zapatero mantenía abiertas líneas de negociación con la banda terrorista, que se rompieron en diciembre de ese mismo año (2006) con el atentado en la T-4 del aeropuerto madrileño de Barajas.

El inspector Ballesteros entró en el bar «Faisán» y entregó a Elosua un teléfono móvil. Según la investigación, al otro lado de la líena Pamiés le habría puesto sobreaviso de que iba a ser detenido, lo que le permitió escapar.

Enrique Pamiés ha sido reconocido por sus treinta años de servicio policial a la lucha antiterrorista. En su procesamiento en esta causa ha mantenido absoluta discreción, nada que apunte a la implicación en aquellos hechos de sus superiores en un momento en el que el Gobierno negociaba con ETA. En aquel momento era secretario de Estado de Interior el socialista Antonio Camacho, y Alfredo Pérez Rubalcaba era ministro de Interior.

Los sindicatos policiales SUP y CEP se han pronunciado sobre el procesamiento de Pamiés. Defienden sin matices la gestión que ha desempeñado desde que es jefe provincial en Huesca, y subrayan su hoja de servicios en la lucha contra el terrorismo durante décadas.
http://www.abc.es/local-aragon/20130116/abci-jefe-policia-huesca-sera-201301160857.html