Detenido el presunto autor del asesinato de un anciano en Jerez

Se fue todo lo lejos de Jerez que pudo, a Oviedo, pero allí ha sido localizado y detenido por la Policía, que ha desarrollado una compleja investigación hasta dar con el paradero de L.V.S., considerado como "el segundo presunto autor del homicidio" ocurrido el 9 de septiembre en el que perdió la vida Juan Torres, de 86 años, y en el que su esposa, Rosario Acevedo, de 79, discapacitada, sufrió golpes y navajazos en su cama.

El detenido había abandonado la ciudad inmediatamente después de ocurrir los hechos recorriendo en su huida gran parte del territorio nacional hasta llegar a Oviedo. Su rastro fue seguido gracias al testimonio del primer presunto autor, ya en prisión. Está previsto que esta semana el juez instructor levante el secreto del sumario, decretado para evitar que los presuntos autores tuvieran información por los medios.

El otro presunto autor del crimen ya fue detenido el 11 de septiembre por los agentes encargados de la investigación de la Comisaría de Jerez. Ambos detenidos se enfrentan ahora, de momento, a cargos por un delito de homicidio consumado y un segundo en grado de tentativa sobre la esposa del fallecido. Según informó la Policía desde el primer momento los agentes destinados a la investigación iniciaron la búsqueda del huido. Las primeras pesquisas apuntaron en un primer momento a la zona del levante español y la búsqueda continuó hasta la comunidad asturiana donde los investigadores pudieron situar al implicado en la ciudad de Oviedo.

En esta ciudad agentes de la Brigada de Policía Judicial en colaboración con los policías jerezanos establecieron un dispositivo de localización que logró descubrir al ahora arrestado oculto en una pensión de la que salía en contadas ocasiones y siempre con el rostro cubierto. Un hecho que llamó la atención de algunas personas. El detenido ya ha ingresado en un centro penitenciario asturiano a la espera de que sea trasladado hasta Jerez donde deberá responder ante el Juzgado que instruye el caso.

Juan, el anciano asesinado, y Rosario, su mujer, eran "dos buenas personas", según los vecinos, y, por causas que nadie conoce, su casa comenzó a ser frecuentada a altas horas de la noche por individuos que entraban y salían, dando portazos que alteraban a los perros del matrimonio.

Algunos vecinos habían dejado constancia ya de su "preocupación" por el "movimiento de personas" de nacionalidad extranjera que solían acudir a casa de este matrimonio agredido, en un bajo de la barriada de Santo Tomás de Aquino, en la zona sur de Jerez. Los vecinos explicaron al presidente de la federación que ambos eran muy buenas personas y que a veces "acogían" en su casa a "gente de fuera" para pasar la noche.