Cambios en cúpula Policía Local La Coruña

La Policía Local cambia a su cúpula tras el relevo del director de Seguridad
Desde 2008, los puestos se cubrían, para ajustarse a la legislación, por convocatoria pública, de la que ahora se prescinde sin que se hayan presentado recursos contra los nombramientos

04.03.2013 | 00:05

El jefe del cuerpo designa a los nuevos responsables sin convocar un concurso de méritos

La destitución de Germán Lago como director general de Seguridad y Movilidad del Ayuntamiento ha tenido consecuencias en la Policía Local, en la que su jefe accidental, José Antonio Brandariz, ha designado directamente a varios altos cargos en lugar de recurrir al sistema de convocatoria pública de los puestos, que se había seguido en este cuerpo desde el año 2008 en cumplimiento de la legislación vigente. Los nuevos nombramientos, según fuentes municipales, no han sido recurridos por nadie.

Las designaciones afectan al intendente Víctor Fernández Chao, quien fue jefe accidental de la Policía Local desde la destitución de Antonio Alfeirán en diciembre de 2011 hasta el nombramiento de Brandariz en abril de 2012 y que ahora es jefe de la Unidad Nocturna. El también intendente Jorge Souto es el nuevo responsable de las Unidades Diurnas. Los cuatro inspectores principales, que eran jefes de unidades, se encargan ahora de dirigir los turnos y uno de ellos de las unidades de la policía de barrio.

Todos estos puestos han sido cubiertos mediante designación directa por el jefe de la Policía Local, pese a que sentencias del Tribunal Supremo indican que este sistema solo debe emplearse para los cargos de alta dirección, situación en la que no se encuentran los intendentes e inspectores principales nombrados para los nuevos cargos. La ley de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad establece que los puestos de servicio deben cubrirse mediante los principios de mérito, capacidad y antigüedad, lo que llevó al anterior director a convocar concursos públicos para nombrar a los diferentes responsables de las unidades.

Tras la salida del director de Seguridad y su relevo por Carlos García Touriñán, el jefe de la Policía Local optó por sustituir a la cúpula del cuerpo, pero prescindiendo del método utilizado en los últimos cuatro años para adaptarse a la legislación. Brandariz ocupa además el puesto de máxima responsabilidad de forma accidental, ya que tras su designación, el Gobierno local estaba obligado a convocar un concurso público en el plazo máximo de un año para cubrir la plaza que ocupa.

Para optar a este cargo es necesario disponer de la categoría profesional de superintendente, que no posee Brandariz y sí Antonio Alfeirán, quien es el único aspirante a cubrir la plaza, aunque es bastante difícil que el Gobierno local que le destituyó le vuelva ahora a restablecer en su puesto, por lo que el Ejecutivo se reserva la potestad de declarar desierto el concurso. Desde su relevo, el anterior jefe de la Policía Local está destinado a tareas administrativas. La Justicia desestimó su recurso contra su destitución.