Cuatro agentes de la Policía Local salvan la vida a un hombre que sufrió un infarto

J.C.P.G. La rápida y eficaz labor de cuatro agentes de la Policía Local de Elda logró salvar ayer la vida a un hombre que cayó desplomado al suelo tras sufrir un repentino infarto. La víctima, el eldense Eduardo Ribes, de 76 años de edad y propietario del conocido restaurante Peter Ribes, se encontraba sobre las 9.45 horas realizando unas compras en el supermercado Senabre de la calle Petrer, en las inmediaciones del Mercado Central, cuando comenzó a sentirse mal. Al percatarse de su estado uno de los dependientes del establecimiento, Gerson Vera, se dirigió a él y justo cuando le dijo que se iba a marchar a casa porque no se encontraba bien perdió el sentido y se desvaneció en la misma puerta.
"La verdad es que pensé lo peor porque ni respiraba ni tenía pulso, y mientras yo llamaba al 112 un compañero mío pidió ayuda a los agentes de la Policía Local que vigilan la zona del mercado", recordaba ayer Vera. En menos de un minuto llegaron al supermercado cuatro agentes y, tras comprobar que el enfermo había entrado en parada cardiorrespiratoria, comenzaron a realizarle la reanimación cardiopulmonar combinando la respiración boca a boca con las compresiones cardíacas. "Ha sido un milagro y quienes han hecho posible el milagro han sido los policías porque yo creía que ese pobre hombre ya no lo iba a contar", señaló el dependiente admitiendo que todavía estaba "muy impactado".
Minutos después llegaba el Samu en cuya ambulancia fue trasladado hasta el Hospital General Universitario de Elda, donde anoche permanecía ingresado en la UCI con pronóstico grave.
Según ha podido saber este diario, el personal del Samu ha felicitado a los cuatro agentes de la Policía Local porque su rápida, diligente y eficaz intervención ha permitido salvar una vida.