Condenado gracias al “inglés de bachillerato” de un policía

(elmundo.es). PABLO HERRÁIZ. Madrid. El juzgado de lo Penal número 8 de Madrid ha condenado a ocho meses de prisión a un hombre con pasaporte australiano llamado Ivica Tomic por propinar un cabezazo a Thomas Michel Marcel Drouet. El suceso ocurrió tras una discusión en el paseo de la Castellana, a la altura del 131, el pasado 4 de mayo a las 15.30 horas, según relata la sentencia.
La Fiscalía pedía dos años de cárcel para el agresor más tres años de orden de alejamiento, aunque la condena se ha quedado sólo en ocho meses más el pago de las costas, según la sentencia facilitada este viernes por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid.

Dice la sentencia redactada por el magistrado Jacobo Vigil que no hubo testigos de la agresión, ni siquiera el hijo del condenado, que estaba cerca. Aunque en el juicio tanto el acusado como su hijo negaron que la agresión a Thomas Michel se hubiera producido, hubo una clave para condenarlo: la conversación en inglés con un policía municipal.

Explica el magistrado que al no haber testigos la versión más fiable proviene de uno de los agentes que llegó al lugar tras el suceso, cuando el Samur ya estaba atendiendo a la víctima. Éste habló en inglés con el agresor, que reconoció haber golpeado a Thomas Michel.

Sin embargo, en el juicio el agresor y el hijo dijeron que el agente no hablaba bien inglés y que seguramente les había entendido mal, a lo que el agente replicó que su nivel de inglés era “el de bachillerato”, pero suficiente para comprender la frase “I hit him” [Le golpeé] que le dijo Tomic.

El juez añade que “es cierto que el nivel de inglés que se obtiene en el bachillerato español, al menos cuando lo estudió el agente, no es alto, pero también lo es que con las nociones así adquiridas, con cierta paciencia por parte del interlocutor, es posible entender el relato de un hecho simple, como es el ocurrido”.

Así, además de por otras declaraciones, el juez explica que la versión más creíble es la del denunciante, y por eso decide condenar al acusado.

Fuente: El Mundo